Conservas

Conservas

Creado el 1 de agosto de 2018
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El desafío llega cuando tenemos una cosecha abundante y necesitamos conservarla de algún modo para que no se eche a perder. Gracias a la preparación de conservas, podemos consumir nuestros alimentos preferidos, aunque no sean de temporada, manteniendo gran parte de sus vitaminas, proteínas y nutrientes.

Además, preparar conservas es una actividad divertida para hacer en familia e implicar a todos los miembros de casa en hábitos de alimentación saludables.

¿Qué es un alimento en conserva?

Básicamente, las conservas son alimentos que han pasado por un proceso específico para preservar al máximo sus propiedades y evitar que se deteriore a nivel microbiológico y enzimático. Un alimento en conserva se podrá consumir tiempo después de su preparación en buenas condiciones y sin afectar a la salud. Es muy importante a la hora de hacer conservas seguir las instrucciones, siempre al pie de la letra, para controlar de manera precisa las diferentes etapas en su preparación.

¿Cómo preparar conservas caseras?

Preparar conservas caseras es una manera muy fácil y sana de consumir alimentos fuera de temporada. Las conservas hechas en casa permiten mantener muchas de las vitaminas, proteínas y nutrientes de los alimentos. Los jugos de cocción conservan las sales minerales de las verduras y frutas.

Debemos asegurarnos de que nuestras manos y los utensilios de cocina estén completamente limpios y esterilizados al igual que los tarros de cristal que vayamos a utilizar. Para hacer conservas en casa, lo ideal es utilizar un tarro de cristal. Antes de utilizarlo es imprescindible esterilizarlo, hirviéndolo durante 15 minutos y escurriéndolo con cuidado de no tocar el interior.

Es aconsejable no llenar del todo los tarros, sino dejar unos dos centímetros para que el alimento pueda expandirse en su interior tras la cocción. Los tarros se cierran con cuidado y se ponen al baño maría, sin que el agua llegue hasta la tapa. El tiempo que tienen que hervir los tarros dependerá del producto.

Te enseñamos a conservar los productos de tu huerta con algunas de nuestra recetas preferidas:

  • Pimientos asados en conserva:

    se asan los pimientos rojos en el horno, se les quita la piel y las pepitas y se cortan en tiras. Al introducirlos en el bote se empujan para que no queden bolsas de aire, se echa el jugo que han soltado y se les añade ajo y aceite de oliva virgen. Se cierra el bote y se cuece durante 10 minutos.
  • Tomates en conserva:

    se lavan los tomates y se les hace un corte en forma de cruz. Se escaldan en agua hirviendo unos 10 segundos, se pelan y se introducen en los botes, apretándolos. Se les pueden añadir unas hojas de albahaca y de laurel. Se añade agua con un poco de vinagre y sal, se cierran y se cuecen al baño María 30 minutos.
  • Mermelada de fresa:

    se limpian bien los fresones, se cortan en cuadraditos, y se riegan con un poco de zumo de limón. Ponlos a cocer 20 minutos con agua y la misma cantidad de azúcar que de fresones. Cuando la mermelada esté fría, métela en los botes cerrados y cuécelos 10 minutos al baño María.

Consejos para hacer y mantener correctamente tus conservas

  • Los alimentos deben estar suficientemente maduros y ser de temporada, para aprovechar mejor sus cualidades.
  • Para optimizar tu tiempo en la cocina puedes esterilizar los tarros mientras cocinas tus alimentos. Lo ideal es que dispongas de más tarros de los que en principio necesitas, para no quedarte sin recipientes.
  • Cuando termina la cocción hay que dejar enfriar los tarros en la olla. Una vez fríos, se comprueba que estén cerrados herméticamente.
  • Antes de almacenarlos, hay que etiquetarlos siempre con la fecha de elaboración.
  • Puedes decorar tus tarros de conservas con telas de colores, cintas, pegatinas tipo pizarra, lazos. Da rienda suelta a tu creatividad y regala conservas a tus amigos y familia. ¡Les encantará el detalle!
  • Las conservas hay que guardarlas en un lugar sin luz, fresco y ventilado.
  • Se deben consumir antes de un año.