Dónde colocar las freesias
El nombre del género freesia es un nombre genérico, dedicado al médico alemán Friedrich Heinrich Theodor Freese. La flor de este bulbo es plana, estrecha y tiene forma de espada, mientras que las flores, aquellas que son dobles, son muy llamativas y se disponen en espigas unilaterales, además de estar caracterizadas por desprender un sutil aroma.
Sin embargo, lo que sucede muchas veces es que no sabemos diferenciar bien entre un bulbo y una flor bulbosa. Por ello, antes de entrar de lleno a nuestra súper guía de cuidados de las freesias (bulbo), te vamos a ayudar a despejar todas las dudas para que seas un auténtico experto y sepas diferenciar a la perfección un bulbo de una flor bulbosa. Lo primero que has de saber es que los bulbos son unos órganos subterráneos de almacenamiento de nutrientes, es decir, que tienen un bulbo o rizoma que les permite almacenar sustancias nutrientes de reserva. De hecho, un bulbo en sí hace referencia a un tallo corto rodeado por capas de hojas capaces de desarrollar nuevas plantas cuando se plantan en la tierra, ya que contienen todos los nutrientes necesarios para el crecimiento inicial. Algunos de los más comunes son los tulipanes o los narcisos.
Sin embargo, cuando hablamos de flores bulbosas nos referimos a todas aquellas plantas que producen flores a partir de bulbos, y aunque ambos términos están bastante relacionados, lo cierto es que su enfoque, por decirlo de alguna manera, es completamente distinto pues los bulbos son en realidad esa parte subterránea de las plantas (refiriéndonos a esa estructura subterránea), mientras que en el caso de las flores bulbosas, nos referimos a la parte “floral” de la planta. Algunas de las más comunes son los jacintos, los gladiolos, los lirios y las fresias.
El sol, la clave de todo ☀️
Lo cierto es que los bulbos de freesia prefieren los climas templados, pues no toleran las heladas fuertes y, por tanto, habrá que protegerlos durante el invierno. Estos, además, necesitan luz solar directa para que echen flor, y por ello, lo ideal es que si decides ubicarlos en tu jardín reciban como mínimo seis horas de luz solar al día.
Época de las freesias
Estos bulbos de primavera, como ya veíamos más arriba, nos darán flores en esta época del año, pero los plantaremos en otoño. Una vez han sido plantados, la freesia germinará y dará lugar a tallos florales delgados con hojas muy largas en forma de cinta, y sus flores aparecerán en racimos en una amplia variedad de colores entre los que destacamos algunos de los más comunes como son el amarillo, el blanco, el rosa, el rojo o el morado.
Cuándo plantar los bulbos
Aunque depende de la región, por norma general, los bulbos de freesias deben plantarse en otoño (una vez hayan pasado las heladas) para que florezcan en primavera. Estos cuentan con una abundante y bella flor primaveral perfecta para lucir en nuestros patios y jardines ya que, a pesar de que la fresia como flor cortada es algo más conocida que el bulbo en sí, no cabe duda de que estos son unos habitantes perfectos para florecer en nuestro jardín fácilmente. Además, su maravillosa fragancia no dejará indiferente a nadie.
Recuerda, finalmente, que son sensibles a las heladas por lo que deberán plantarse a una profundidad que les proporcione una adecuada protección contra el frío. Además, deberás asegurarte de que se encuentran en una zona con un suelo bien drenado y ligeramente ácido, asegurándote también de que el suelo no se encharque para evitar que se pudran. En cuanto al riego, ten en cuenta que tus bulbos van a necesitar que los riegues moderadamente después de plantarlos y que deberás mantener el suelo húmedo durante la temporada de crecimiento. Si quieres que echen más flor deberás aplicar fertilizante equilibrado con fósforo y potasio. Eso sí, recuerda seguir siempre las indicaciones que figuren en el envase del producto.
Cuándo pasarlas a maceta
Las freesias son unos bulbos que se adaptan muy bien para cultivo tanto en tierra como en maceta. Sin embargo, son muchos los que dudan, una vez los tienen en tierra (ya plantados) si se les podría pasar a una maceta y, por consiguiente, cuándo deberán hacerlo. Lo más recomendable, en ese caso, será hacerlo en primavera antes de que comiencen a brotar o una vez hayan florecido en el jardín.
No obstante, recuerda seguir estos pasos antes de pasarlos. ¡Toma nota!
- Escoge una maceta con buen drenaje para evitar el encharcamiento del agua, pues esto podría dañar tus bulbos.
- Utiliza un sustrato universal o de flor y enriquece con humus o guano comprobando siempre que el suelo tiene buen drenaje.
- Planta tus bulbos a una profundidad de 5 a 8 centímetros, colocando siempre los bulbos con la punta hacia arriba.
- Deja suficiente espacio entre ellos para permitir un buen desarrollo de las raíces.
- Después de plantar, riega bien la tierra de tu maceta manteniéndola ligeramente húmeda durante el período de crecimiento, y siempre sin encharcar.
- Finalmente, no te olvides de colocar tu maceta en un lugar con luz solar parcial o completa, pues las freesias generalmente van a preferir una luz brillante. No obstante, si decides colocar tu bulbo en un lugar con mucho sol o mucha luz, asegúrate de regar tu bulbo con más frecuencia.
Cuándo florecen y brotan
Como ya veíamos más arriba, los bulbos de freesia florecen generalmente en primavera, aunque lo cierto es que la época específica puede variar un poco según donde vivamos y, por ende, las condiciones climáticas que deriven de él. De hecho, es importante destacar que en climas más cálidos, es posible que las freesias comiencen a florecer muy a principios de la primavera, pero en los lugares más fríos es probable que dicha floración se retrase un poco. Normalmente se plantarán antes de la primera helada para pasar después un periodo de reposo durante el invierno, comenzando a brotar a medida que las temperaturas van aumentando durante la primavera.
Duración de la flor de freesia
La duración de la flor de la freesia suele oscilar entre las 8 y 12 semanas tras la plantación, aunque esto va a depender como ya veíamos antes, de las condiciones que se vayan desarrollando.
Tratamiento de los bulbos desde la compra hasta que las freesias dan flor
En primer lugar, debes tener en cuenta que las freesias son un tipo de bulbo de floración estival que habrá que almacenar en seco hasta la plantación. Recuerda que esto es clave para que el resultado de floración de tus freesias sea óptimo.
Una vez llegue la época para plantarlo, es decir, a inicios del otoño, deberás hacerlo siempre en un lugar soleado de tu jardín. Eso sí, asegúrate siempre antes de hacerlo que haya pasado el riesgo de heladas.
En el caso de las freesias, lo más recomendable es que las plantes en grupos bien diferenciados en jardineras o directamente en el suelo. Una vez florezca la espiga floral, deberás abonar tu bulbo cada quince días en caso de utilizar un abono líquido, y una vez al mes en el caso de tratarse de un abono granulado.
Finalmente, ten en cuenta que una vez la flor se haya puesto fea o se haya estropeado, deberás detener el riego o suspenderlo. En ese momento podrás sacar los bulbos y guardarlos, una vez limpios, en un lugar oscuro y seco hasta que vuelvas a plantarlos. Ten en cuenta que, en invierno cuando ya hace frío, podrás optar por dejarlo solamente con las hojas o bien cortarlas totalmente para después dejar tus bulbos en reposo hasta la siguiente primavera que volverán a salir y a florecer.
No obstante, recuerda que si deseas obtener más información sobre algún bulbo en concreto puedes consultar siempre los esquemas del envase de cada bulbo.
Qué significa regalar fresias
Las fresias, además de llevar consigo un significado claro de positividad, tienen la capacidad de expresar gran aprecio y gratitud, además de compartir belleza, aroma y más de una sonrisa cuando nos las regalan. Cuando hablamos de fresias, como flor cortada, tenemos que hacer referencia, en primer lugar, a sus diferentes y llamativos colores, pero también, por supuesto, a los cuidados que precisan estas como flor cortada 💐 y que, por supuesto, no son iguales a los cuidados que se han de seguir cuando nos referimos a los bulbos. Te lo contamos aquí abajo, así que presta atención:
- Antes de poner tu ramillete de fresias en un jarrón, retira el embalaje (en el caso de que lo lleven) para ayudar a que tus flores respiren.
- Asegúrate siempre de que el jarrón esté limpio, para que las bacterias no puedan afectar a las flores, y llénalo con agua fría.
- Corta los tallos de las flores en diagonal un centímetro para que absorban correctamente el agua. También puedes cortar más si quieres adaptar la altura del ramo a tu florero o jarrón.
- Por último, coloca tu ramo y no te olvides de cambiar el agua, preferiblemente, cada dos días.
Finalmente, recuerda que las flores bulbosas, como es el caso de estas fresias, siempre han de estar constantemente en remojo, y preferiblemente en agua fría.
Colores de las freesias
Amarillas
Las fresias de flor amarilla simbolizan, sin duda, alegría y energía, pues el amarillo es un color que irradia calidez, originalidad y vida.
Rojas
Las fresias de flores rojas son llamativas y apasionadas, y estas nos van a transmitir, sin ninguna duda, unos mensajes con un significado muy positivo, asociado casi siempre con el amor, la pasión y con el romanticismo. Un amor incondicional y verdadero, ya sea hacia la pareja, hacia la familia o hacia los amigos.
Blancas
Las fresias de flores blancas son clásicas y elegantes pues, de hecho, ellas simbolizan pureza, tranquilidad, y también clase y elegancia. Además, son símbolos de luz, transmiten inocencia y van a aportar a nuestro jardín un aire fresco completamente renovado, limpio y tranquilo .
Moradas
Las fresias de flores moradas están asociadas a la realeza, la sabiduría, la imaginación, pero también para aportar un toque de misterio y sofisticación. Y a ti… ¿Se te ocurre una mejor forma de cuidar tu jardín?
Desde las históricas calles de Núremberg, donde su aventura de Erasmus dejó una huella imborrable, hasta los vibrantes corredores de Fronda, Ana ha tejido una carrera de seis años marcada por la curiosidad y la creatividad combinando su experiencia en periodismo con un enfoque único en decoración, brindando siempre los mejores consejos y tendencias.
De personalidad alegre, curiosa y vivaz, Ana no solo transmite sus conocimientos, sino que nos invita a descubrir el apasionante mundo de las plantas y la decoración. Su habilidad para transmitir ideas de manera cautivadora la convierte en una autora destacada en Fronda, donde su pasión y dedicación son evidentes en cada uno de sus artículos.