Tanto el salón, como el comedor, o la unión de ambos, suelen ser lugares de la casa donde pasamos mucho tiempo, sobre todo durante el día. Por eso es tan recomendable llenarlo de plantas ya que, además de su función ornamental, estas ayudan a regenerar el aire que respiramos.
Cada planta, no obstante, tiene distintas necesidades de luz y temperatura, por lo que, antes de comprar solo en función del criterio estético, es buena idea reparar en las características del espacio de que disponemos para averiguar qué planta responderá mejor en esas condiciones.
Salones oscuros frescos
Si nuestro salón comedor tiene poca luz y está orientado hacia el norte o no cuenta con calefacción, es aconsejable elegir plantas que necesiten luminosidad escasa y una temperatura que pueda bajar hasta los 5 ºC sin problema.
Aspidistra: Sus impresionantes hojas verdes no necesitan mucha luz para lucir sanas.
Aspidistra: Sus impresionantes hojas verdes no necesitan mucha luz para lucir sanas.
Salones oscuros cálidos
Si nuestro salón comedor tiene poca luz y está orientado hacia el norte o no cuenta con calefacción, es aconsejable elegir plantas que necesiten luminosidad escasa y una temperatura que pueda bajar hasta los 5 ºC sin problema.
Zamioculca: almacena agua en sus gruesas hojas, de manera que no necesita mucha humedad, ni que pulverices sus hojas.
Tronco de Brasil: si mantienes la humedad elevada, la luz no es necesaria, aunque el contraste entre los colores de sus hojas será menor.
Chamaedorea: se la conoce también como “palmera de salón” y no es nada exigente con la cantidad de luz, aunque sí requiere la máxima humedad posible y no soporta el frío.
Kentia: tiene un porte elegante y llena cualquier rincón de estilo y frescura.
Alocasia: con sus increíbles hojas, esta planta atrapa la atención allá donde la coloques, sin demandar gran cantidad de luz.
Phlebodium: a este helecho le encanta la sombra, pero le horroriza el frío.
Nuestras favoritas para salones con poca luz
Salones con luz directa y frescos
Si deseas ubicar plantas en una zona del salón donde entra el sol de manera directa, pero la temperatura tiende a ser baja, debido a la orientación o la falta de calefacción, te recomendamos las siguientes, por ejemplo:
Salones cálidos con luz indirecta
Cuando hablamos ya de temperaturas en torno a los 20 ºC, si quieres colocar plantas en una zona donde el sol entra de forma indirecta o difuminada, serían aconsejables, entre otros, los siguientes géneros de plantas:
Ficus
Necesita luz y espacio para crecer y soporta bien los entornos secos.Dale tiempo para adaptarse a su nueva localización, los cambios le hacen perder vitalidad.
Beaucarnea
Al almacenar agua en la parte inferior de su tronco, no requiere demasiado riego. Evita el sol directo y colócala en un recipiente ancho y pequeño, ya que las raíces se desarrollan mejor si están apiñadas.
Drácena
Aguanta bien la falta de humedad, aunque agradecerá que pulverices sus hojas con agua. Riégala solo cuando la tierra esté seca.
Spathiphyllum
Florece durante todo el año, algo poco habitual en las plantas de interior. Necesita mucha luz, pero nunca directa, porque podría quemar sus hojas.
Salones cálidos con luz directa
Por último, aquellas plantas que van a soportar la luz solar directa, en un salón o comedor donde la temperatura no baja de los 18 ºC, deberían contar con determinada resistencia y, entre ellas, encontramos las siguientes:
Yuca
Su fácil mantenimiento la convierte en un género de planta muy popular. Trasplántala a una maceta más grande cada año, o renueva la tierra si ya ha alcanzado el tamaño deseado. Pero lo más importante, como para la mayoría de plantas de interior que resisten la luz intensa, es no regarla en exceso, pues sería muy perjudicial para las raíces.
Cactus
Mientras les proporciones la ventilación adecuada, soportarán altas temperaturas y sol directo sin problema. Al fin y al cabo, son originarios de zonas muy cálidas, incluso desérticas. Hay especies y formas casi infinitas para elegir el que mejor combine con la decoración de tu sala.
Senecio
Esta planta suculenta tiene como mayor enemigo el exceso de agua, pues está preparado para combatir la sequía gracias a sus hojas carnosas, que almacenan agua. Procura esperar siempre a que la tierra esté bien seca antes de regarla, pues es preferible a crear encharcamientos y colapsar el drenaje.
Kalanchoe
Es también una suculenta que, como tal, conserva agua en sus hojas. Si vives en un clima mediterráneo donde no hay heladas, la puedes colocar también en el exterior, aunque, en ese caso, es conveniete protegerla del sol directo. Su textura aterciopelada hace de esta planta una elección original para un rincón especial de tu salón.