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La Iberis sempervirens, conocida como Carraspique o Cestillo de plata, es una planta perenne de bajo crecimiento ideal para cubrir suelos, bordes y rocallas. Esta planta, originaria del sur de Europa y el norte de África, es muy apreciada por sus flores blancas en forma de racimo que florecen en primavera y atraen a polinizadores como abejas y mariposas. Su follaje verde oscuro y siempreverde proporciona una atractiva cobertura durante todo el año, lo que la convierte en una excelente opción para jardines y paisajes.
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La Iberis sempervirens, conocida como Carraspique o Cestillo de plata, es una planta perenne de bajo crecimiento ideal para cubrir suelos, bordes y rocallas. Esta planta, originaria del sur de Europa y el norte de África, es muy apreciada por sus flores blancas en forma de racimo que florecen en primavera y atraen a polinizadores como abejas y mariposas. Su follaje verde oscuro y siempreverde proporciona una atractiva cobertura durante todo el año, lo que la convierte en una excelente opción para jardines y paisajes.
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La Iberis sempervirens, conocida como Carraspique o Cestillo de plata, es una planta perenne de bajo crecimiento ideal para cubrir suelos, bordes y rocallas. Esta planta, originaria del sur de Europa y el norte de África, es muy apreciada por sus flores blancas en forma de racimo que florecen en primavera y atraen a polinizadores como abejas y mariposas. Su follaje verde oscuro y siempreverde proporciona una atractiva cobertura durante todo el año, lo que la convierte en una excelente opción para jardines y paisajes.
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Cuidados
- Ubicación: Plante la Iberis sempervirens en un lugar con pleno sol o sombra parcial para asegurar una floración abundante.
- Suelo: Prefiere suelos bien drenados y ligeramente alcalinos.
- Riego: Riegue de manera regular pero evite el exceso de agua, ya que la planta es sensible a la pudrición de la raíz.
- Abono: Aplique un fertilizante balanceado de liberación lenta en primavera para estimular el crecimiento y la floración.
- Poda: Pode después de la floración para mantener una apariencia compacta y promover un crecimiento denso del follaje.
- Propagación: La Iberis sempervirens se propaga fácilmente mediante semillas, esquejes o divisiones de plantas en primavera u otoño.
- Resistencia al frío: Esta planta es resistente al frío y puede tolerar heladas y temperaturas bajas.
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