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El Tomate injertado Beef F1 M-12 es un híbrido de crecimiento indeterminado, desarrollado para ofrecer una producción abundante y frutos de alta calidad. Sus tomates, de forma esférica y un peso medio de 180-200 g, presentan hombros verdes característicos y destacan por su textura firme y excelente sabor. Su vigor y resistencia a múltiples enfermedades lo hacen ideal tanto para cultivos profesionales como para huertos urbanos, adaptándose a distintos sistemas de cultivo.
- Nombre científico: Solanum lycopersicum (híbrido F1)
- Tipo: Tomate injertado de crecimiento indeterminado
- Frutos: Esféricos, de 180-200 g, con hombros verdes
- Textura: Firme y carnosa
- Sabor: Equilibrado, con un buen nivel de dulzura y acidez
- Productividad: Alta, con cosechas prolongadas
- Resistencia a enfermedades: ToMV, Va, Vd, Fol: 1,2, Ma, Mi, Mj
- Adaptabilidad: Se desarrolla bien en invernadero, suelo y cultivos hidropónicos
Ventajas
- Alta resistencia a enfermedades: Protección contra virus y hongos comunes en el cultivo del tomate.
- Producción prolongada: Su crecimiento indeterminado permite cosechas continuas a lo largo de la temporada.
- Frutos de gran calidad: Carne firme, excelente sabor y tamaño uniforme.
- Ideal para diversos sistemas de cultivo: Se adapta a cultivo en suelo, invernadero o hidropónico.
- Mayor vigor y rendimiento: Al estar injertado, presenta un desarrollo más fuerte y eficiente.
A tener en cuenta
- Necesita tutorado: Debido a su crecimiento indeterminado, requiere entutorado para un desarrollo óptimo.
- Temperatura óptima: Prefiere climas templados, evitando temperaturas extremas.
- Riego controlado: Sensible a la falta o exceso de agua, se recomienda riego por goteo.
- Fertilización adecuada: Para maximizar la producción, necesita un aporte equilibrado de nutrientes.
- Espaciado recomendado: Se sugiere dejar suficiente separación entre plantas para un buen desarrollo.
Cuidados
- Riego: Moderado y constante, preferiblemente por goteo para evitar enfermedades fúngicas.
- Exposición: Pleno sol, con al menos 6-8 horas de luz diaria.
- Sustrato: Suelo bien drenado y rico en materia orgánica.
- Fertilización: Aplicar abonos ricos en potasio y fósforo para estimular la floración y el engorde de los frutos.
- Poda: Eliminar los brotes laterales para favorecer la producción de frutos más grandes.
- Protección: Utilizar mallas o acolchados para evitar contacto directo con el suelo y reducir riesgos de enfermedades.
- Cosecha: Cuando los frutos alcancen su color y tamaño óptimos, aproximadamente a los 70-80 días después del trasplante.
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